MARCO CONTEXTUAL
HUERTOS ECOLÓGICOS
Actualmente, la agricultura se percibe por la mayoría de la gente como una saludable
actividad, que se realiza en íntimo contacto con la naturaleza. Generalmente, se le
atribuyen notables beneficios para el medio ambiente. Cada vez, más gente es consciente
de que la agricultura química ejerce un fuerte impacto en el medio ambiente y la salud
de las personas. En la agricultura convencional se trata el campo como si fuera una
factoría de vegetales. En ella, toda forma de vida que no sea el cultivo elegido debe
ser destruida. Y su variante cool, la producción integrada, aplica el mismo enfoque,
pero con mayor control en el uso de los mismos productos que la agricultura
convencional. Eso sí, con carteles... Esto crea ecosistemas estériles y
desnaturalizados. Si lo sumamos a la generalización de los monocultivos, obtenemos
hábitats tan pobres que cualquier plaga los puede dañar. Sobre todo, si no se realizan
los tratamientos químicos que el técnico de turno indique. 6 Cartel de advertencia en
pesticidas químicos Huerto Ecológico: Manual para campo y terraza Como ya os habréis
dado cuenta, esto resulta ser la pescadilla que se muerde la cola. Es así como se crea
una gran dependencia de las sustancias químicas de la que resulta difícil escapar.
Tampoco podemos obviar la contaminación de acuíferos por los excesos del abonado químico
y, en menor medida, por residuos de pesticidas. Este problema está muy arraigado en
zonas tradicionalmente agrícolas, que siguen contaminando de nitratos cada nuevo pozo
que abren. Pese a todo ello, no debemos olvidar que cualquier cultivo vegetal ejerce de
productor de oxígeno y sumidero de dióxido de carbono. Por ello, incluso la agricultura
química tiene su papel ambiental. Aunque también es cierto que la producción de dióxido
de carbono en la agricultura convencional es mucho mayor. Esto se debe al elevado gasto
energético de la síntesis de fertilizantes y plaguicidas químicos. Y aportando
soluciones: Por el contrario, la Agricultura Ecológica se alza como una de las mejores
aliadas del medio ambiente. La correcta comprensión y aplicación de los conceptos
básicos de la agricultura ecológica convierte al agricultor en protector del medio
ambiente. Al menos, de las parcelas que cultiva. A partir de ahí, las buenas cosechas
llegarán casi sin que se dé cuenta. 7 La Tierra, nuestro hogar Huerto Ecológico: Manual
para campo y terraza Los conceptos básicos: El agricultor ecológico comprende que debe
fomentar la biodiversidad. Es bien sabido que todos los organismos de un ecosistema
tienen funciones específicas. Y, claro, este nunca estará completo y equilibrado si nos
dedicamos a eliminarlos sistemáticamente. También se fomenta esta diversidad biológica
mediante el uso de variedades locales y la total prohibición de transgénicos. El
agricultor ecológico debe mantener y fomentar la fertilidad natural del suelo. Pero esto
no debe hacerse a base de compuestos químicos, sino mediante las asociaciones con
plantas fijadoras de nitrógeno, como el trébol o la alfalfa. También es clave la
devolución a la tierra de toda la biomasa posible (restos de podas o siegas, etc.).
Cuando sea necesario, también se podrá añadir estiércol o compost, aunque lo mejor sería
dejar animales sueltos que se ocuparan de esta tarea de forma natural. El agricultor
ecológico sabe que el suelo no es solo tierra, sino que es algo vivo y complejo. Está
formado por vegetales, animales y microorganismos con infinidad de relaciones entre
ellos... Es un sistema vivo, no el mero soporte para nuestros cultivos. Debemos ayudarlo
a evolucionar de forma sana y natural, devolviéndole el equilibrio que la agricultura
química lleva más de un siglo destruyendo. En definitiva, debe producir alimentos de la
mayor calidad mediante la comprensión del campo como un ecosistema. Solo así, mediante
el fomento de sus procesos naturales, lo podrá proteger y ayudar a alcanzar su madurez
ecológica y productiva. (Huerto Ecológico: Manual para campo y terraza. Antonio y Rafael
Pérez Ramada).
Las mujeres con las que trabajamos solo el 5% cuentan con tierra para siembra en su
localidad, considerando que pertenece básicamente a sus mismos familiares, motivo por el
cual consideramos abordar el tema de huertos desde la técnica de hidroponía.
La técnica de hidroponía es un método utilizado para cultivar plantas utilizando
soluciones minerales en vez de suelo agrícola. La palabra hidroponia proviene del griego
hidro=agua y ponos=labor-trabajo.
Las raíces reciben una solución nutritiva equilibrada disuelta en agua con todos los
elementos químicos esenciales para el desarrollo de las plantas, que pueden crecer en
una solución mineral únicamente, o bien en un medio inerte, como arena lavada, grava o
perlita, entre muchas otras.
La técnica de hidroponia tiene como característica de adaptabilidad automática para
zonas urbanas y/o personas que habitan en zonas rurales con espacios limitados, se
pronostica que el 70% de la población vivirá en zonas urbanas para el 2050.
La agricultura en las ciudades, también tendrá beneficios importantes para la seguridad
alimentaria, junto con las regiones rurales; para superar la escasez de tierra, agua y
otros recursos relacionados como la contaminación y abióticas así como el alto costo de
mano de obra y los problemas de sequia.
La hidroponia o cultivo sin suelo modernos jugarán un papel importante en la agricultura
del futuro y son de un gran valor para los sistemas ecológicos.
Como en muchos casos es esencial, la paciencia, la persistencia, la responsabilidad y el
compromiso, para la técnica de hidroponia sucede lo mismo: si no alimentamos, si no
cuidamos, si no atendemos no se dará lo que se espera
TIPO DE PERSONAL
Las personas que colaboran en la asociación cumplen con los siguientes perfiles
profesionales: Abogadas/os, Sociólogas, Psicólogas, Derecho Constitucional y Amparo,
Historiadoras, Derechos Humanos, Estudios de Género, Estudios Políticos y Administración
Pública.